Algo que puede sonar a cachondeo, pero que evita muchas pérdidas de tiempo es la siguiente:

Quien propone se lo come

Creo que queda claro, pero por si hay alguna duda, la cuestión es que quien hace una propuesta tiene que estar dispuesto a llevarla adelante (se entiende que en compañía de otras personas interesadas).

Mi opinión en relación a las normas es similar a la que tiene la ciencia en relación a sus leyes, pues la ciencia se inclina siempre por la razón más simple, elegante y estética.
Algo así como en la Utopía de Tomás Moro, país en que todo se administra con pocas pero eficaces leyes.
Como siempre digo es una idea que dejo a vuestro mejor criterio.
Un abrazo. Atentamente, Javier Caso Iglesias.

Un grupo que funciona bien es como un equipo de fútbol.
Sus miembros son interdependientes. No puede ir cada uno por su lado. Y eso quiere decir que han construido una estructura, unas normas, unas reglas del juego.

De todo esto deberemos irnos dando cuenta poco a poco. No tiene sentido construir normas si no se ve la necesidad de construirlas. Primero tiene que visualizarse una situación de lentitud o estancamiento, como la de un coche que se ha salido de la carretera y patina en el barro. Entonces buscamos algo para ponerle debajo de las ruedas y que vuelva a la carretera y pueda coger velocidad. Eso serían las normas.

Algunos pensamientos que nos pueden ayudar a ver la necesidad de las normas:

• El grupo aprende al unísono. Avanzamos juntxs. Las dinámicas nos hacen avanzar y aprender. ¿Podemos permitirnos el lujo, como grupo, de seguir adelante con una dinámica —donde estamos aprendiendo, por poner un ejemplo, a construir consenso— dejando al margen a compañerxs que no están participando? El grupo tiene que ser sensible a la ausencia de participación de sus miembros. Es lo mismo que si la persona sale a la calle sin un brazo o una pierna. O como cuando te vas a trabajar y te dejas unas cuantas herramientas en casa.

• El grupo debe esperar a los rezagados. Los rezagados retrasan al grupo, lo enlentecen, pero la solución no es dejarlos atrás. A mi me gusta el senderismo, y cuando he llevado a algún grupo a la montaña, yo no he dejado a nadie atrás, sino que he ido al paso del más lento, acompañándole.

• Los miembros de un grupo deben tomar consciencia de que su participación y aprendizaje son vitales para la buena marcha de la totalidad del grupo. Una cadena es tan fuerte como el más débil de sus eslabones. Porque cuando la cadena tenga que soportar tensión, siempre se va a romper por el eslabón más débil. Por lo tanto, debe formar parte de mis valores (respeto, honestidad, responsabilidad, etc...) el fortalecerme como eslabón de cadena, para no perjudicar a la cadena.

• ¿Y qué hacer con los eslabones que finalmente renuncian a formar parte de la estructura? ¿No sería esa una solución? ¿No haría más fuerte la cadena? Sí, pero más corta. El grupo se empobrece, pierde riqueza, pierde activos, pierde valor. Cada persona es una fuente de recursos para el grupo. Por lo tanto, aunque el grupo haga todo lo posible por no perder a sus miembros, debe tener en cuenta que algunos —por las circunstancias que fueran— se quedarán por el camino, se apartarán del grupo. El grupo, para no empobrecerse o incluso morir, debe tener algún sistema de reposición de miembros.

Algunas pistas o indicaciones informales que intentaban orientar al grupo para resolver estos problemas:

• En el cuestionario de inscripción ya se pedía conexión y participación cada dos o tres días como máximo.

• Hay un hilo para avisar al grupo cuando no podamos conectarnos en ese tiempo. Así el grupo puede esperar, y no pasa nada.

• Hay un hilo de TAREAS PENDIENTES que podemos consultar cada vez que nos conectamos y en donde podemos ver lo que hay que hacer de un simple vistazo.

• En el procedimiento 01 PREGUNTAR AL GRUPO se alienta a que votemos con rapidez para que la decisión se pueda cerrar y así ganar en eficiencia.

Este es el tipo de normas al que que hay que dar forma, consensuar e internalizar para que el grupo funcione como la seda, para que sus miembros aprendan y avancen con normalidad.

No hay prisa, estamos empezando... Las normas del grupo son el culmen, la guinda, la piedra de toque, la verdadera medida de un grupo, su hora de la verdad. Primero el grupo tiene que conocerse, aprender a comunicarse y tomar decisiones... pero para eso ya se necesita una mínima estructura. Es una pescadilla que se muerde la cola y se retroalimenta: conociéndonos y comunicándonos iremos creando estructura, y creando estructura nos permitirá conocernos y comunicarnos mejor.

Tal vez, amigo @jesusmano, la solución esté en reformular las preguntas de otra manera:

¿Cómo podemos, como grupo, seguir adelante con una dinámica dándo al tiempo la posibilidad a otrxs compañerxs, que no están participando al ritmo de lxs más activxs, a que continúen en el taller al ritmo que deseen?

¿Qué medidas hemos de adoptar, mientras avanzamos con nuevas dinámicas, para realizar la labor de concienciación de otrxs compañerxs, que no están participando al ritmo de lxs más activxs, para que su implicación en este grupo de aprendizaje crezca?

Pienso que hemos de hacer posible diferentes ritmos de aprendizaje en un mismo Grupo-Taller. Incluso la tarea de motivación de lxs más activxs con relación a lxs menos activxs debe de articularse como una dinámica de gran valor para el Grupo-Taller.

Como siempre digo estas son mis ideas que dejo a vuestro mejor criterio.

Recibid un abrazo. Atentamente, Javier Caso Iglesias.

Me gustaría Aportar algo, però es didícil tras una exposición tan Clara... Però interpreto que SI, algunas dosis de ritual y cortesia son necesarias...y ritmo , y, por mi parte...voluntad de informarse...pretendo ser un eslabón débil, però no desesperante

Las normas creo que ya están presentes en nosotros…si hemos llegado a este espacio colaborativo en la red…y hay muchos que no lo han hecho…ya es indicador de algo…seamos desobedientes…también participativos…adiós normas…creo que sabemos que si no estamos pendientes…esto no funciona…y puede ser que a alguno de nosotros no nos queden más espacios de participación…así que ahí dejo la idea…desobedientes y muy participativos…de todas formas…si creemos que deben de haber normas…que las haya…si es posible pocas…

Os habréis dado cuenta de mi discapacidad ortográfica…fruto de ser muy desobediente…no participe del sistema educativo existente en mi época…80 % del tiempo hacia novillos…el 15 % exámenes y el 5% restante participaba con mis compañeros en clases de excelentes profesores…que hice en ese tiempo de no ir a clase…en bup…aprender del mundo y divertirme….en la universidad…trabajar para pagar mi libertad…

Si han de existir normas que sean tan hermosas…que apetezca seguirlas siempre…

@javier21 Me encanta Leerte...es estupendo poesie es como pensar...Qué guay, Claro que Podemos...Qué maduren otros...Estado naciente perpetuo...però me encanta sobre todo poesie se que, mientras @jesusmano y @Javy sigan por aquí, será un contrappunto al que me apunto, però no un descalabro.....Vivi EN un pueblo alternativo...sin mÁs leyes que Las de la immediata supervivencia...y era como el Wild West....Estoy en Contra de la impostura..y de Las normas importadas...però en cambio considero votos y conquistas cuando un grupo acuerda y consolida una conducta que le funciona...Ufff...me oigo y no me reconozco...la inteligencia colectiva se me desborda!!!

Menos es más

En mis tiempos, estuve en un grupo de montaña; pero solo me apuntaba a las marchas.

Allí, éramos más radicales. Poníamos a la cabeza de la marcha a los más lentos. Es la mejor forma de no perder a nadie.

La fuerza de una cadena es la de su eslabón más débil.

De todas formas, no tenemos que perder de vista que estamos en un taller de iniciación. No hace falta que arreglemos el mundo pasado mañana, sino que tengamos una idea general del programa propuesto, que tengo que reconocer que me gusta.

Así que ejercicios sencillos, buen gusto, buen humor y aprender a trabajar en red.

Ya existen otros grupos más sesudos donde podemos practicar lo aprendido en este taller.

La palabra Normas nos asusta, porque nos evoca lo vivido en una sociedad profundamente autoritaria: normas que nos imponen desde fuera y que hemos de limitarnos a obedecer, so pena de sanciones y castigos.

Hemos de superar este lastre. Las normas son el camino, el cómo se hace, el cómo se llega. Una técnica no la conseguirás realizar si no atiendes a las normas, que te dicen cómo se hace esa técnica. Una meta no la alcanzarás si no atiendes a las normas (planificación, organización) que te dicen cómo se logra llegar a esa meta.

Un grupo sin organización, sin estructura, no es nada, no puede funcionar. Y la organización, la estructura, son normas. Eso sí, estamos hablando de autoorganización. Las normas se las tiene que proporcionar el grupo a sí mismo.

Autogestión

Por qué no dejamos de darle vueltas a la bolita y hablamos directamente de autogestión que tiene unas connotaciones muy determinadas.