CONSENSO: Normas

Tratémonos como personas, olvidémonos del todas y todos.
Respetémonos en lo que nos contrariemos.

Confianza.

Creo que ha de ser la norma básica, en una relación con esta premisa las relaciones son mas sanas.

El respeto y las buenas formas se utilizan en las RRSS como armas de censura en aras de acallar el debate, en la búsqueda del tirano consenso absoluto pretendido por las minorías, que no es mas que acaba o bien desinterés o anuencia.

RESPETO PACIENTES Y AGRADECIDOS
Con esto PODEMOS funcionar bien

Este mensaje quedó en LOOMIO CLM. Lo traslado aquí, adaptándolo un poco.

A veces, gente ajena al grupo visitará nuestro taller, bien por despiste o bien para comentar algo sobre lo que estamos haciendo.

Tenemos que considerar normales estas visitas, ya que nuestro entrenamiento se está realizando en un lugar “público”, y, además, queremos que sirva como modelo para la formación de muchos otros grupos. Por lo tanto, cualquier persona no perteneciente al grupo puede realizar un comentario esporádico, o hacernos preguntas, que podremos contestar todos los miembros del grupo que lo deseemos.

¿Y qué pasa con la gente nueva que quiera apuntarse al grupo? Digamos que el período de inscripción ya se ha cerrado, porque teníamos que poner el límite en alguna parte, y lo pusimos en los 12 miembros.

Pero no hay ningún problema, se pueden seguir creando tantos grupos como se quiera.

Supongamos que llega alguien y quiere apuntarse. Como no puede, lo que tiene que hacer es convertirse en el promotor del siguiente grupo. Si no sabe qué hacer, que haga exactamente lo mismo que estamos haciendo nosotros. Que nos tome como modelo y que juegue a una perseguía. Que vaya siguiendo nuestros pasos y acabará formando un grupo, y este grupo acabará teniendo una estructura propia y un funcionamiento autónomo.

Hasta ahora leo: respeto, confianza, paciencia, agradecimiento... Esto no son NORMAS, son VALORES.

Lo explico.

Empecemos por diferenciar nombres, adjetivos y verbos.

Los nombres referencian las cosas, los adjetivos referencian las cualidades o características de las cosas, y los verbos las acciones, lo que las cosas pueden hacer. Ejemplos:

NOMBRES: persona, dragón, silla, árbol.

ADJETIVOS: alto, grande, caliente, verde.

VERBOS: correr, volar, bailar, crecer.

Los VALORES, como los adjetivos, se refieren a las cualidades, rasgos o características de las cosas, y a la estimación (positiva o negativa) que atribuimos a dichas cualidades. Bondad, maldad, respeto, desvergüenza, confianza, desconfianza, sencillez o complejidad son cualidades, rasgos, características que puedo poseer en mayor o menor grado, y cuya valía, valor o estimación determinaré de forma subjetiva, según mi criterio o interpretación. Si estoy tratando de ayudar a los demás, tendré en alta consideración la bondad, pero si estoy buscando un cómplice para robar un banco, le daré la más alta puntuación a la sinvergonzonería.

Las NORMAS, como los verbos, se refieren a las acciones, a las instrucciones que nos dicen lo que debemos hacer. Por ejemplo: levantarse a tal hora, asearse de tal manera, desayunar de tal otra. En caso de tal circunstancia, hacer esto. En caso de tal otra, hacer esotro. Si es día de diario, ir al trabajo. Si no, ver la tele... Las normas facilitan nuestras actividades al convertirlas en rutina. Las normas nos permiten saber en todo momento lo que hacer, nos ahorran tiempo y recursos, nos hacen eficaces y eficientes. (Eficaz es quien consigue alcanzar su objetivo; eficiente quien lo alcanza consumiendo el menor tiempo y recursos posibles).

Sobre las normas

• Este es un tema avanzado porque las normas son una consecuencia natural del buen funcionamiento del grupo. No se pueden aprender los procesos y estructuras de grupo sin internalizar cientos de normas y convertirlas en algo rutinario.

• No hace falta escribir largos reglamentos y aprendérselos de memoria. Eso no tiene sentido. Eso sucede cuando no hay confianza ni pedagogía. Entonces nos parece que, para evitar desaguisados en una asamblea, es necesario escribir un código de conducta que deje bien claro lo que se puede hacer y lo que no: que no hay que insultar, que hay que respetar al moderador, etc... Nos sentimos más protegidos con un código de normas en mano, con el que poder defendernos en caso de salir perjudicado. Nos volvemos legalistas, cuando lo que hay que hacer es confiar en la perfectibilidad y educabilidad de las personas, y aprender todos juntos a hacer las cosas bien, a internalizar los procedimientos, practicando una y otra vez e intercambiando papeles.

• El propio grupo debe controlar que no haya desaguisados, participando masivamente. El reglamento es para cuando no hay participación y un único líder o unos pocos líderes tienen que tirar del carro y escudarse detrás de un reglamento para suplir la ausencia de lo esencial: participación, implicación, aprendizaje, vida.

• Es el mismo caso que aprender a leer, o a hacer divisiones en el colegio. No lo hicimos aprendiéndonos una lista de reglas, sino practicando, practicando y equivocándonos una y otra vez, hasta que esas reglas acabaron por formar parte de nosotros.

• Por lo tanto, el grupo acabará por tener cientos y miles de reglas, pero no nos daremos cuenta de ello. Serán un producto natural del aprendizaje y de la experiencia. De la misma manera que me levanto cada día y me desenvuelvo bien en mi mundo porque estoy obedeciendo miles de normas que he ido asimilando a lo largo de mi vida, a través del aprendizaje y la experiencia.

• Las reglas sirven para facilitar la actividad, para que el grupo funcione como una máquina bien engrasada. Lo que un grupo hace cotidianamente puede resumirse en cinco pasos:

1. ANALIZAR la realidad para obtener hechos, datos, INFORMACIÓN. Averiguar cómo es la realidad.

2. INTERPRETAR esa información para obtener una OPINIÓN sobre cómo debería ser la realidad.

3. DECIDIR objetivos, metas, actividades, proyectos para transformar la realidad en función de nuestro concepto de cómo deberían ser las cosas. Ir de lo que es a lo que debe ser.

4. EJECUTAR lo planeado en el punto anterior.

5. EVALUAR lo conseguido y compararlo con lo que queríamos conseguir. Volver al punto 1 para ver en qué nos hemos equivocado, qué es lo que se nos ha pasado por alto o iniciar nuevos objetivos y metas.

• Este bucle continuo que tiene lugar en los grupos —por medio del cual los grupos crean cultura y sociedad, transformando continuamente la realidad que les rodea— requiere el dominio de muchas normas, muchos procedimientos. Cada uno de los cinco pasos implica gran cantidad de procesos. Es la internalización de normas, es decir, de los pasos a seguir en cada situación, lo que hace que el grupo fluya de manera continua y confortable, sin atascos ni bloqueos. De la misma manera que el estudiante acaba haciendo las divisiones con cierta soltura. O los adultos nos acabamos desenvolviendo bien en un nuevo trabajo.

• Por lo tanto, y en conclusión, lo que vengo a decir es que, para empezar a funcionar y a aprender en grupo, son necesarias muy pocas normas. Porque el aprendizaje parte del desorden y del desconocimiento, y consiste precisamente en ir construyendo poco a poco ese orden y ese conocimiento desde abajo, con la práctica y la participación de todas y todos.

• Eso es lo que podemos tratar aquí en este momento: las dos o tres normas (cinco como mucho), sencillitas y fáciles de recordar, que nos puedan servir para arrancar motores y encender la chispa de nuestro aprendizaje. Que nos facilite el ponernos en marcha y empezar a crecer como grupo.

Yo propongo la siguiente norma:

Mirar a diario en la pizarra la lista de TAREAS PENDIENTES, y si hay alguna que aún no hemos hecho, hacerla.

Si algún día no podemos mirar la pizarra, no pasa nada, pero lo ideal es echar un vistazo cada día, a la hora que podamos, cuando estemos más tranquilos.

La participación en un grupo virtual se parece a un juego de rol. Es como si estuviéramos todos sentados, en círculo, y cada cual decide cuándo jugar su turno. Los demás responden también cuando a ellos les viene bien. Todo puede fluir perfectamente a esa velocidad. El problema vendría cuando alguien tuviera que ausentarse del grupo por unos días. Estas ausencias deberían comunicarse al grupo. El grupo debería conocer que alguien no está presente, y tenerlo en cuenta. Esta podría ser una segunda norma. Podríamos abrir un hilo en el taller para comunicar que los días tal y tal no estaremos presentes.

Por lo demás, la implicación y compromiso que pongamos en leerlo todo, analizar lo que estamos aprendiendo (haciendo esquemas y ordenándonos la información) así como compartir con los demás lo que aprendemos y ayudar a los demás a entender, todo eso es de sentido común o lo iremos aprendiendo y practicando, conforme vayamos adquiriendo capacidad.

No insultos.
No descalificaciones.
No prejuzgar.
No Desmoralizar (esta es por reflexionar).

El hecho de que una persona insulte o no no puede depender de que exista o no exista la norma de "NO INSULTAR".

Quiero decir que uno no va por ahí mirando las normas para ver si puede insultar o no. Aquí en este grupo puedo insultar, porque no han puesto la norma de "NO INSULTAR". Aquí en este otro grupo no puedo insultar, porque sí la han puesto...

Si pensamos así, algo está fallando. Yo no quiero que no me insulten porque se lo impidan las normas. Quiero que no me insulten porque me respeten como persona, compañero y amigo. Tenemos que crear un clima de confianza y respeto, y eso no se consigue imponiendo normas, sino creando cohesión de grupo. Si no sabemos hacer esto es cuando nos lanzaremos desesperadamente a la vía fácil de la institución de normas, pero eso estará indicando nuestra impotencia y nuestro fracaso a la hora de crear grupo.

Es cuando el grupo no funciona que se necesitan normas de ese tipo, pero en ese caso, tampoco importa mucho. Es como tratar de dar vida artificial a un zombie, a algo que está muerto.

Insultar.... Descalificar.... Prejuzgar... Es tan subjetivo !!!
Si sobre una persona X escribo que es cobarde...o un sinvergüenza.... Si esto es constatable y objetivo : estoy insultando y descalificando ?
Si utilizo una perífrasis "correcta" deja de considerarse insulto o descalificación?
Por qué la mayoría de las normas son "no" esto y "no" lo otro ???

Pensad en el daño que puede hacer un padre que desconfía de su hijo. O un profesor que desconfía de su alumno. El mismo daño se produce cuando la confianza en un grupo está ausente. La confianza, el respeto y otros valores básicos se tienen que dar por sentado, ya que no pueden depender de reglas o imposiciones. Cuando están ausentes estos valores y se necesita una normativa... es una desgracia infinita.

¿Y si me insultan o me agreden? Siento que tengo que estar prevenido contra eso, estoy a la defensiva, y ahí es donde busco reglamentos que me protejan o expulsen o castiguen a mi posible agresor... Pero esta actitud defensiva y desconfiada no es la que debe predominar en un grupo. Puede ser útil en una sociedad más amplia donde la mayoría somos extraños, pero no en un grupo donde lo que debe predominar es un clima de confianza y amistad.

Cuando salgo con mis amigos no estoy a la defensiva, preguntándome ¿y si mi amigo me pega? Tendría que haber alguna norma que diga: si me pegas, ya no te junto. Así, si él conoce la existencia de esa regla, se lo pensará dos veces antes de levantarme la mano.

Un grupo de amigos no se pone a hacer un reglamento que deje claro las condiciones por las cuales se va a mantener o perder esa amistad. Si me insultas o me haces esto o aquello vamos a dejar de ser amigos. Dos amigos pueden enfadarse y dejar de ser amigos, pero estas situaciones no se prevén fríamente en normativas y establecimiento previo de lineas rojas: si te pasas de esta raya, hemos acabado.

No se actúa así cuando la confianza y el respeto se presupone. Y el presuponerlas es condición sin la cual no se puede avanzar en la construcción del grupo.